✨ "Todo es energía, y eso es todo lo que hay. Si igualas la frecuencia de la realidad que deseas, no puedes evitar obtener esa realidad." – Albert Einstein
Tu mente se cree todo lo que piensas. Literal. No distingue entre lo que estás viviendo y lo que estás imaginando. Y muchas veces —o la mayoría— nuestros pensamientos son más una imaginación construida que una realidad tangible. Vivimos mentalmente a base de películas internas, proyecciones e interpretaciones. Pero la mente no lo cuestiona: se lo cree y le manda señales al cuerpo para que actúe en consecuencia. Así es como nos anclamos en un estado de ánimo y una frecuencia energética concreta. Para bien o para mal.
El ejemplo más claro: el estrés. Muchas veces no hay una amenaza real, pero con solo pensarlo, tu cuerpo entero reacciona. Se tensa, se agita, se acelera. Lo sientes como si estuviera pasando ahora mismo.
La buena noticia: este mecanismo también funciona para lo bueno. Si visualizas sensaciones expansivas, paz, alegría, gr…